Leptospirosis, una de las zoonosis más prevalentes

Perro corriendo en el agua

¿Qué es la leptospirosis?

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La leptospirosis es una enfermedad bacteriana que afecta a animales domésticos, salvajes y al hombre. Es una zoonosis de las más importantes y con mayor prevalencia a nivel mundial.

Es producida por bacterias del género leptospira que pueden causar daño hepático, renal, hemorrágico e incluso la muerte.

Esta bacteria tiene una alta actividad en climas húmedos y cálidos. Los animales que se encuentran en mayor riesgo de contraerla son aquellos que nadan o beben en aguas estancadas. Pueden verse aumentos de casos en temporadas estivales de lluvias.

Los animales portadores de mayor importancia en veterinaria son el perro, el cerdo y los bovinos y como animal salvaje, los roedores.

Puede sobrevivir en el medio ambiente durante meses si encuentra condiciones de temperatura y humedad favorables.

Aproximadamente 10 millones de personas se infectan por año de leptospirosis y los perros y roedores representan los principales transmisores y reservorios.

Transmisión y síntomas

La trasmisión en perros se da principalmente por orinas contaminadas y otros fluidos corporales. Las bacterias pueden ingresar también por vía percutánea en aquellos animales en contacto con el agua; por beber o nadar en la misma, por ejemplo, perros en temporadas de caza son muy susceptibles.

La vía de aerosoles es también importante para la transmisión de esta enfermedad. El tiempo entre la infección y la aparición de los primeros síntomas varía entre 4 y 10 días.

La gran variedad de signos y síntomas con la que se presenta esta enfermedad hacen que la misma sea difícil de diagnosticar tanto en animales como en el hombre. Estos incluyen fiebre, decaimiento, inapetencia, mialgias, dolores renales de proyección lumbar, ictericia, orina oscura y abundante, sangrados nasales, tos, dolor en la micción, etc.

Pueden darse cuadros sobreagudos, agudos o crónicos los cuales no implican necesariamente la presencia de ictericia. La presentación subclínica representa otro reto para el diagnóstico de leptospirosis y hace que la serología sea la forma precisa de identificación.

Cuando la recuperación es posible, los animales siguen siendo portadores y propagan la bacteria por orina siendo este aspecto lo que hace difícil de erradicar esta enfermedad. Los signos de dolor en la micción y dolor lumbar son los más indicativos para orientar el diagnóstico de leptospirosis.

La muerte por insuficiencia renal y hepática se da como resultado en los cuadros crónicos.

Personas con perroDiagnóstico y tratamiento

El diagnóstico debe correlacionar la existencia de signos clínicos con factores de riesgo en combinación con pruebas serológicas pareadas para ver títulos de anticuerpos MAT por sus siglas en inglés (Microscopic Agglutination Test). Esta es la prueba recomendada por organismos como la OPS (Organización Panamericana de la Salud) y la OIE (Organización Internacional de Epizootias), por brindar mayor validez diagnóstica, ya que ofrece la mejor capacidad de distinguir y cuantificar anticuerpos contra determinado serogrupo.

La metodología diagnóstica dependerá del momento de la infección ya que la bacteria circula en sangre durante 10 días después de la aparición de síntomas. Sin embargo, la sospecha de la presencia de la enfermedad ha de confirmarse por medio de la correlación de signos clínicos del paciente, estudios de gabinete y repetición de la prueba MAT con 15 días de intervalo.

Cuando es posible, resulta conveniente la realización de pruebas complementarias como PCR, microscopía de campo obscuro y pruebas de diagnóstico rápido.

La Prevención funciona

Si bien los dueños de mascotas pueden tomar medidas como evitar que el animal beba o se exponga a aguas estancadas (charcos, cubetas, pantanos, ríos, entre otros) y mantener limpios sus platos de agua y comida, la vacunación es clave para evitar la enfermedad. Actualmente existen vacunas que ofrecen excelente protección a nuestros perros.

La vacunación, representa la secuencia lógica para evitar la leptospiremia y leptospiruria y disminuir la severidad de los signos clínicos en algunos casos de infección. La protección vacunal neutraliza por medio de los anticuerpos a las proteínas o carbohidratos que envuelven a la bacteria. Este mecanismo es específico de las distintas serovariedades.1

En Boehringer Ingelheim impulsamos el concepto de Una Sola Salud, que incluye la salud humana, animal y ambiental. Sabemos que las vidas de las personas y los animales están interconectadas; y una de esas conexiones es el hecho de que más de dos tercios de las enfermedades infecciosas emergentes en los humanos son zoonóticas, o sea, que se contagian de los animales a las personas. Por eso, la prevención de las enfermedades zoonóticas en los animales a través de la vacunación es tan importante.

Fuente:

1Fontaine, A. Branger, A. Gray, H. y Klaasen G. (2003) Comparison of the efficacy of three commercial bacterins in preventing canine leptospirosis. Vet Rec.153:165.

 

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