Mejorar la atención a la esquizofrenia

Más de 24 millones de personas en todo el mundo viven con esquizofrenia. A pesar de su prevalencia mundial, la esquizofrenia es una afección de salud mental grave y a menudo incomprendida. Es por eso que tenemos el compromiso de apoyar a las organizaciones asociadas en sus esfuerzos por reducir las desigualdades en salud que enfrentan las personas que viven con esquizofrenia y otras afecciones graves de salud mental. 

 La esquizofrenia puede afectar la vida de las personas de muchas maneras, desde el empleo hasta las relaciones personales e incluso la esperanza de vida. Las personas que viven con esquizofrenia a menudo enfrentan muchos obstáculos, como el estigma que enfrentan a diario o las opciones de tratamiento limitadas y servicios de apoyo inadecuados. Para que podamos ayudar a superar estas barreras y garantizar que quienes viven con esquizofrenia reciban la atención que merecen, debemos obtener una imagen precisa del panorama actual de la atención de esta condición y escuchar de primera mano a quienes viven con esta afección.    

 

 

Deterioro cognitivo asociado a la esquizofrenia  

La esquizofrenia afecta a una de cada cien personas y es una de las condiciones de salud mental más devastadoras. Esta afección involucra un amplio rango sintomático que se inscribe dentro de tres dominios: síntomas positivos, síntomas negativos y síntomas cognitivos. 

  • Síntomas positivos: alucinaciones o delirios. 
  • Síntomas negativos: reducen las emociones y comportamientos. Por ejemplo, la dificultad de experimentar placer o motivación e incapacidad de sentir alegría. 
  • Síntomas cognitivos: alguien que experimenta un deterioro cognitivo asociado con la esquizofrenia puede encontrar mayor dificultad en sostener conversaciones, completar las tareas diarias más simples o recordar cosas básicas. 

Aproximadamente el 85% de las personas que viven con esquizofrenia experimentarán algún nivel de deterioro cognitivo. Superar los desafíos que presenta esta condición podría permitir a estas personas vivir una vida más autónoma y productiva. Queremos posibilitar que las personas que viven con esquizofrenia restablezcan conexiones sociales positivas y que puedan disfrutar con sus amigos, familiares y seres queridos. 

En Boehringer Ingelheim, nuestra misión es abordar las necesidades médicas no cubiertas en salud mental, como el deterioro cognitivo asociado a la esquizofrenia, a través de la psiquiatría de precisión para mejorar la calidad de vida de las personas. A través de enfoques innovadores y centrados en el paciente, creemos que podemos ayudar a las personas que viven con problemas de salud mental a conectarse con sus vidas, sus seres queridos y la sociedad.